A 10 días de que el gobierno anunciara el pedido de juicio político a los cuatro integrantes de la Corte Suprema, la CGT mantiene el silencio y aún no se pronunció a favor del proyecto oficialista.

A diferencia de gobernadores, intendentes y otros sindicalistas como Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña, la Confederación General del Trabajo no se expresó hasta ahora acerca de la medida anunciada por el presidente Alberto Fernández el pasado 1 de enero y para el que el gobierno no cuenta con los números necesarios en el Congreso.

Se trata de un nuevo contrapunto entre la CGT y el gobierno, en medio de la fuerte crisis interna en el Frente de Todos, que se da unos meses después de que Pablo Moyano llamara a apoyar al oficialismo “hasta el último día” y a pesar de la suba de la inflación.

Cabe recordar que el gobierno tampoco logró el apoyo de la totalidad de gobernadores peronistas. Fueron 11 los mandatarios que respaldaron al jefe de Estado en un documento dado a conocer la semana pasada, que contaba las firmas de Axel Kicillof (Buenos Aires), Raul Jalil (Chaco), Jorge Capitanich (Chaco), Mariano Arcioni (Chubut), Gildo Insfrán (Formosa), Sergio Ziliotto (La Pampa), Ricardo Quintela (La Rioja), Alicia Kirchner (Santa Cruz) Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Gustavo Melella (Tierra del Fuego) y Osvaldo Jaldo (Tucumán).

El anuncio

Alberto Fernández sorprendió al anunciar el pasado 1 de enero a la mañana el pedido de juicio político contra los jueces de la Corte Suprema Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti “por haber incurrido en forma reiterada en conductas que configuran la causal de mal desempeño en sus funciones”.

La oposición lo calificó como una “vergüenza histórica” y adelantó que no acompañará la medida. El oficialismo no cuenta con los números necesarios en el Congreso, por lo que la medida naufragaría.