Luego del asesinato de dos oficiales en una zona cercana a París, el primer ministro francés, Manuel Valls, advirtió que más inocentes perderán la vida en el país galo por ataques terroristas.

El mandatario indicó que desde 2013 se han llevado a cabo 15 atentados y aseguró que las autoridades están haciendo todo lo posible para frustrar los planes terroristas.

Las declaraciones de Valls tuvieron lugar después del asesinato de los dos oficiales por un yihadista que al momento del ataque juró lealtad al Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés).

En una entrevista a la emisora France Inter, el primer ministro galo pidió que no se realicen manifestaciones masivas en las próximas semanas, por temor a que los extremistas planeen nuevos atentados.

"No podemos tener manifestaciones así en París en las próximas semanas", señaló, antes de pedir a la Confederación General del Trabajo (CGT), que lidera las protestas, que renuncie a nuevas convocatorias de marchas como la de ayer en la capital, en la que hubo al menos 58 personas arrestadas por altercados, con 29 policías y 11 manifestantes heridos, luego de las protestas por la reforma laboral.

Según la Policía, la manifestación de ayer reunió a 80 mil personas, menos que algunas de las ocho convocatorias precedentes contra la reforma laboral.

A este clima de preocupación se suma el desarrollo de la Eurocopa de fútbol, para la que se desplegó un fuerte operativo de seguridad con más de 90 mil efectivos.

Los organizadores prometieron un evento con niveles de seguridad"sin precedentes", ante las recientes amenazas terroristas. Sin embargo, a menos de una semana del inicio de la competición, ya se registraron múltiples choques entre simpatizantes rivales.