Después de 24 horas, el gobierno nacional "abrió un canal de diálogo" con los controladores aeroportuarios, aunque la medida de fuerza fu ratificada por el delegado coordinador de Asociación de Trabajadores del Estado-ANAC, Marcelo Belelli, y pasadas las 13 continuaban los problemas para volar en la mayoría de los aeropuertos argentinos.

El paro de 48 horas anunciado por ATE –que arrancó hoy a las 6 de la mañana– trajo dolores de cabeza a más de un pasajero. Aunque por la mañana se registraron numerosas demoras y cancelaciones, este mediodía comenzaron a verse más anuncios de vuelos "en horario" en las pantallas.

El delegado sindical de ATE-ANAC, Marcelo Belelli, "se abrió un canal de dialogo con funcionarios del Ministerio de Transporte, algo que veníamos reclamando". Sin embargo, explicó que tras la asamblea que realizaron los trabajadores, se decidió completar la medida de fuerza, que se levantará el domingo a las 6 de la mañana.

La huelga alcanza tanto a vuelos de cabotaje como internacionales. Algunos están demorados y otros directamente fueron cancelados hasta nuevo aviso. Por la mañana las pantallas y la web, no informaron correctamente la totalidad de las afectaciones.

El Gobierno denunció que la medida de fuerza "no tiene que ver con un reclamo de los trabajadores, sino con una disputa entre sindicalistas". Sin embargo, aún no tomó ninguna medida que pudiera impedir los trastornos a los usuarios. Desde anoche, en el exterior, comenzaron a suspenderse los vuelos que tenían como destino la Argentina.

Esta mañana, Belelli explicó en diálogo con Radio La Red que los vuelos en desarrollo son atendidos con normalidad, mientras que "no están saliendo los aviones que están en tierra".

"En Ezeiza está bastante normal el tema, si bien hay guardias policiales en las puertas de las dependencias, no tenemos complicaciones. El problema es en Aeroparque donde la PSA (Policía de Seguridad Aeroportuaria) no deja pasar a los compañeros que están de turno. Allí el nivel de conflictividad es permanente", señaló Belelli.

El delegado de ATE Cuyo en la ANAC, Fernando Gatica, explicó que "en estos momentos en Aeroparque hay solo 3 de los 9 controladores que deberían estar trabajando".

El motivo de la huelga de ATE es el rechazo a un nuevo convenio colectivo realizado con la exclusión del gremio de los estatales, que representa a la mayoría de los trabajadores de la aviación civil.

Belelli denunció que el nuevo convenio flexibiliza a los trabajadores del sector y les quita la estabilidad laboral que actualmente tienen, por lo que la medida de fuerza no será levantada. "La conciliación obligatoria no puede salir porque esto ya fue conciliado en mayo y nosotros participamos siempre de las reuniones, pero no se resolvió ninguno de los puntos. Y en caso de dictarse, no la vamos a acatar", advirtió el sindicalista.

Debido a esta intransigencia, en los Estados Unidos y otros países, vuelos que estaban programados para aterrizar a partir de las 6 de la mañana, de manera preventiva, fueron suspendidos.

"Nosotros le pedimos a Dietrich un espacio sincero de diálogo con él para discutir la política aérea del país. Hoy por hoy se nos quiere cambiar la situación laboral. Vamos a pasar a depender de un empresa y ni siquiera pudimos formar parte de las condiciones en las que nos van a traspasar; eso es muy grave", concluyó Belelli.

Los aeropuertos del interior que están registrando más acatamiento de la medida son: San Luis, Resistencia, Salta, Posadas, Rio Gallegos, El Calafate, Bariloche, Tucumán, Jujuy y Rio Cuarto.