El comienzo del incendio fue en la tarde del miércoles 30 de noviembre y dieron aviso a las autoridades provinciales, pero como en ese momento jugaba Argentina-Polonia, recién fueron al lugar dos días después a corroborar el hecho, lo confirmó una de las dueñas del refugio Corazón Fueguino, Noelia Ruiz, en cuyas inmediaciones se circunscribe el epicentro del incendio que por estas horas se extiende a más de 7500 hectáreas. 

“Nosotros nos enteramos del foco de incendio, a 2 km del casco del refugio de corazón fueguino, el miércoles en el horario del primer tiempo de Argentina…. es decir aproximadamente a las 16:30 horas” dijo Noelia Ruiz titular del refugio “Corazón fueguino”.

Tras hacer la denuncia en Defensa Civil,  inmediatamente Noelia Ruiz se traslado con un grupo de amigos y allegados para tratar de controlar la amenazante situación, Ruiz consignó que las autoridades provinciales “se comunicaron oficialmente con nosotros el viernes por la tarde”, es decir 48 horas después de declarado el fuego, con una columna de humo visible a decenas de kilómetros a la redonda. 

Ese viernes, le pidieron permiso para que el equipo de brigadistas hiciera base en la propiedad, como uno de los lugares desde donde se podía acceder para combatir el fuego. “En nuestro sector, el primer grupo de brigadistas arribó el sábado 3 de diciembre, a primera hora de la mañana”. 

Esos operarios están actualmente alojados en una de las cabañas de la propiedad, mientras que reconoció a Carlos Henninger, propietario de un campo vecino, como la persona que no solamente les avisó, sino que concurrió al lugar para verificar la efectiva presencia del siniestro, el propio miércoles. 

“Fue uno de los primeros informantes que se acercó a la zona, él estaba en la estancia Los Cerros, visualizó humo que venía de nuestro sector e hizo lo imposible para tomar contacto con nosotros, hasta que logró comunicarse con mi sobrino” relató Noelia. 

Según se desprende de sus dichos, la propia familia fue la que hizo frente al incendio durante esos primeros dos días: “Mi hermano estaba en Ushuaia con mi papá, y como fue de buena fuente, él, mi pareja, un grupo de amigos y mi papá acudieron directamente hasta el lugar”. 

En términos de causas y responsabilidades, Ruiz dijo que, si bien “hay indicios, la certeza no está. Están investigando y tomando peritajes. Lamentablemente la certeza y el motivo no se saben. Mi punto de vista es que fue una negligencia humana, quiero suponer que, de plena inconsciencia e ignorancia, si no, excedería mi lógica”. 

Al igual que todos en Tolhuin, se esperanzó en que “ojalá llueva torrencialmente”, informando lo poco que ha llovido poco en las últimas semanas, por lo que “el suelo está muy seco, todo esto no favorece”. Noelia lamentó que se repita la experiencia del último incendio en la zona en el 2012, cuando sucedió algo similar: “Con lo que teníamos se trató de combatir en forma rudimentaria, hasta que llegó el operativo. Por eso es la impotencia de ver cómo hay acciones que se pueden ya prever en forma mucho más inmediata, considerando estos detalles y la magnitud que toma en cuestión de minutos”. 

Finalmente, Noelia Ruiz reclamó una “comunicación real y concreta de las autoridades, algo lógico, pero no distorsionada. Por eso una tiene que estar viendo todas las caras de una misma moneda. Yo lo viví y sé lo que está sucediendo en nuestro sector”, señaló, extendiendo un agradecimiento a todas las personas que se preocuparon y comunicaron por la situación, y especialmente “a los bomberos que, pese a todo este contexto, ponen su cuerpo y su vida”.