Existen y hubieron muchos Concejales que pasaron por su 4 años de gestión y no se les conoce su voz. Es decir su pensamiento más puro en primera persona, dicho de otra forma hay Concejales que no son capaces de fundamentar lo que piensan, frente a sus pares y mucho menos en un recinto frente al “Pueblo”. De ahí que tener que fundamentar el voto es sea cual fuera es una decisión oportuna que siempre debería haber existido.

La decisión del presidente del Concejo Deliberante, Dr. Raúl Von der Thusen, va en esa dirección, como también la necesidad de implementar cambios por la burocracia administrativa.

Tras la reunión mantenida con directores y jefes de área, y con sus pares en la última sesión del año, el flamante presidente se muestra pro activo en tomar decisiones.

“El Concejo Deliberante es la institución más importante que tiene la ciudad y hay que jerarquizarla. Ahí estamos los representantes de los vecinos y el servicio tiene que ser de excelencia”, sostuvo.

“El recurso humano con que contamos es excelente. Hay gente con muchísimos años y experiencia, que ha pasado por distintos gobiernos municipales y distintos presidentes, pero hace falta una pintada de cara en algunos detalles vinculados con lo administrativo”, dijo sobre uno de los puntos a modificar.

“El estado tiene que ser más moderno y ágil y no burocratizar tanto un trámite, por eso solicité a directores y jefe de cada área que presenten proyectos a la Presidencia para poder estudiarlos, a fin de acotar los trámites administrativos”, indicó.

“Hay proveedores que no cobran no sólo porque no remite los fondos el Ejecutivo sino porque es muy burocrático el trámite del expediente. Queremos informatizarlos, con un programa como el SIGA, donde el mismo proveedor puede ingresar con su clave y saber dónde se encuentra su expediente”, informó el presidente.

También prevé implementar plazos de tramitaciones. “Hoy no existen plazos y tiene que existir un plazo. El proveedor no puede estar esperando lo que nosotros creemos que es el tiempo oportuno”, subrayó.

En materia legislativa también “hay algunas cosas por reformar”, apuntó, y citó como ejemplo cercano que ayer los concejales Rossi y Colazo se retiraron del recinto. “No podían votar por una cuestión ética una ordenanza de Agrotécnica Fueguina. Pidieron un cuarto intermedio, cuando yo se los di, se levantaron y se fueron del recinto. Igualmente teníamos quórum y pudimos votar las ordenanzas, pero es otra cuestión a arreglar, porque nuestro reglamento es del año ’60 y no permite abstenerse de votar. Muchas veces no se vota negativamente sino que uno se abstiene, y no es que todo el proyecto está mal”, explicó.

“La votación es a mano alzada, y quien no la levanta es considerado voto negativo. Lo que se hace en la práctica es solicitar permiso a Presidencia para levantarse del recinto; o pedir permiso a Presidencia para abstenerse y no se cuenta el voto. Me parece que hay que cambiar al voto nominal en algunas situaciones, que hoy no se realiza. Se hace a mano alzada por la afirmativa y en la versión taquigráfica queda constancia de los votos positivos solamente. Me gustaría que quede escrito quién votó por la afirmativa y la negativa”, expresó.

Además del voto nominal, espera un voto fundado y fue parte del pedido a sus pares: que “al momento de votar fundamenten ese voto. No en todas las ordenanzas, porque algunas son de mero trámite, pero sí en temas como recolección de residuos, o transporte de pasajeros. En la cámara  de Diputados o Senadores se fundamenta el voto y acá nos limitamos a levantar la mano, arreglamos el voto en parlamentarias y terminó ahí”, cuestionó.

“Tenemos la responsabilidad de darle a conocer a los vecinos por qué votamos como votamos”, concluyó Von der Thusen.

Por reglamento, sólo se levanta la mano y queda constancia del voto positivo; tampoco habría registro claro de los casos de abstención.