Violencia, sospechas de racismo y una supuesta confusión. El video de una nueva detención fatal de un policía blanco a un hombre negro volvió a despertar conmoción en Estados Unidos.

La víctima esta vez es Eric Harris, un hombre de 44 años acusado de tratar de vender un arma ilegal a un agente encubierto. El victimario, Robert Bates, de 73 años, agentes de la reserva de la policía de Tulsa, quien afirma que creía tener en su mano su Taser (arma eléctrica) y no la pistola. El hecho ocurrió el pasado 2 de abril en ese condado de Oklahoma, pero el video recién se conoció durante este fin de semana.

En las imágenes, se escucha cuando un policía le dice a Harris: "Necesito que te pongas bocabajo''. Al mismo tiempo se oye a una mujer en el fondo que reclama "Dejen de pelear".

Mientras el oficial maltrata a Harris, tirado en el suelo, se escucha un disparo y la voz de un hombre que dice "Oh, le disparé. Lo lamento''.

Harris entonces grita “Me disparó”. ¡Dios mío!''. "Al diablo, tú corriste. Cállate la boca'', le contesta el oficial.

Entonces Harris le indica que no puede respirar, a lo que el oficial responde: "¡Al diablo con tu respiración!".

Harris recibió la atención de paramédicos en el lugar pero murió después en un hospital en Tulsa.

El video fue hecho público a petición de la familia de Harris. Lo grabaron los agentes con cámaras que llevaban en sus anteojos, reveló la policía del condado Tulsa.

Bates creyó que tenía en la mano una pistola de electroshock que utilizaría para incapacitar a Harris cuando hizo el disparo fatal, según el propio agente.

Un investigador que revisó los detalles del incidente en el que se hizo el disparo concluyó que el agente sufrió un fenómeno conocido como "lapsus y confusión automatizada".

Jim Clark, sargento de policía de Tulsa al que el departamento de policía pidió investigar el incidente, dijo que Bates fue víctima de un fenómeno de alta tensión en el que el proceder de una persona "no obedece" el curso pretendido de acción porque se "superpone una reacción más dominante".

Los resultados de la pesquisa fueron entregados a los fiscales, que decidirán si presentan cargos.

Este video es el segundo en una semana que muestra nuevas evidencias de la brutalidad y el racismo en las fuerzas policiales estadounidenses. El martes pasado, un oficial de Carolina del Sur, fue acusado de asesinato por la muerte de Walter Scott en una persecución.

En los últimos meses se han conocido en Estados Unidos numerosos casos de ciudadanos negros muertos a manos de oficiales de policía blancos.

La muerte en agosto de 2014 de un joven negro desarmado en la ciudad de Ferguson (Misuri) y la posterior absolución del agente responsable provocó masivas protestas en todo el país