Río Grande.- Desde el Juzgado de Instrucción N° 2, se iniciaron las indagatorias en relación a dos pediatras del Sanatorio Fueguino que en agosto del año 2013 atendieron a la pequeña Yoana Valentina Alarcón, quien murió en brazos de su padre mientras aguardaba ser atendida en la sala de dicho sanatorio, luego de haber llevado a la nena en reiteradas oportunidades.

Rodrigo Alarcón, padre de la víctima, se hizo presente en tribunales con la esperanza que la causa avance, y espera que “nunca más quisiera que estas médicas toquen a niños, porque no les interesa nada, no les importa nada”, dijo respecto de los pediatras involucrados.

En cuanto a los días previos a la muerte de Yoana, su padre explicó que “a ella la habían operado –cuando tenía un año de edad- de la apéndice, y después la llevé con dolores abdominales, y solamente lo que hizo el médico fueron unos análisis, dijeron que sólo era un virus pasajero, que se le iba a pasar” y prosiguió explicando que el médico “abrió la computadora y me dijo, acá dice en internet que con este remedio, el virus se le iba a pasar”.

“La nena siguió con vómitos, no mejoró nada. No recuerdo como era el nombre del medicamento. Mi hijita seguía con vómitos”, detalló el hombre.

“Al día siguiente la llevamos a la nena, nos vio la Dra. Zoffoli que me dijo arrogantemente cuando llegué, no te la vio el doctor anoche? Ya está, tenés que esperar que le haga efecto el medicamento”, sin embargo, la nena continuaba con dolores, por lo que la pediatra finalmente la revisó “la nena le muestra donde le dolía, y le dijo acá, a lo que respondió, esta nena lo hace de mimosa, pero yo sabía que no lo hacía de mimosa”, dijo el padre con congoja.  De esta manera, la profesional “la puso en la camilla, la miró, le dio una inyección para parar los vómitos, y que le diera gatorade”.

“Bueno, el lunes que fue feriado, y el martes a las 8 de la mañana que la tenía que atender el médico, mi hijita se me murió. La llevaron a urgencias, y nada pudieron hacer. Me la atendieron tres días así no más, y no hicieron nada”, reclamó Alarcón y agregó “yo confié en la palabra de los médicos, pero nada me la va a devolver a mi hijita”.

“Que se haga justicia”

En cuanto a los tiempos de la justicia y lo que espera el padre de Yoana Alarcón con el trámite de la causa dijo: “Ojalá, Dios quiera y se haga justicia para que ningún chico llegue a manos de estos médicos”.

“Se demoró mucho por el tema de las pericias hasta que llegó a Buenos Aires, a la Corte Suprema de Justicia, pero hasta donde yo sé, la descuidaron y no cumplieron con lo que debe ser la medicina, fue un abandono total hacia ella”, aseguró Alarcón.

Por último, en cuanto a la labor de estas pediatras, el hombre indicó: “Nunca más quisiera que toquen un niño, no les interesa nada, no les importa nada”.

Fuente: Diario Provincia 23.