Los precios de las naftas y el gasoil en las estaciones de todo el país subieron 4,5 por ciento el sábado pasado en el marco del programa Precios Justos que las petroleras suscribieron con el gobierno nacional y por el cual se planteó un sendero de actualizaciones mensuales para los valores al público de las naftas y el gasoil hasta mediados de agosto. Se trató del séptimo incremento en los precios de los combustibles que se aplica desde noviembre de 2022.

En lo que va del año las naftas y el gasoil acumulan un alza del 35,60%, contra una inflación que se espera se ubique en 48% en los primeros seis meses de 2023.

Los precios de las naftas en CABA

Nafta súper: $204,60;

Nafta premium: $262,60;

Gasoil: $219.80;

Gasoil premium: $300.

Cuánto cuesta llenar el tanque

Llenar el tanque de combustible de un Fiat Cronos (es el sedán fabricado en Córdoba), con un tanque de 48 litros, cuesta 9.820 pesos si se carga la nafta más accesible. Si se carga premium, esa cifra asciende a 12.604 pesos.

En tanto la Toyota Hilux, con motor gasolero, requiere del diésel de mayor calidad. Teniendo en cuenta que en su tanque entran hasta 80 litros, llenarlo puede cuesta 24 mil pesos. El cálculo vale también para la Volkswagen Amarok y la Ford Ranger, que tienen la misma capacidad en sus tanques (80 l).

Considerando el valor de la nafta súper, otras cuentas que se pueden sacar en base a la capacidad de sus tanques son: llenar el de un Volkswagen T-Cross o un Renault Sandero cuesta 10.230 pesos (ambos tienen 50 litros); el de un Volkswagen Gol, 11.253 pesos (55 litros, lo que equivale a 14.443 pesos de nafta premium); y el de un Ford Ka, 10.434 pesos (51 litros).

Cómo gastar menos combustible

Conducir suavemente. Cualquier auto y en cualquier condición eleva el consumo de combustible al acelerar y frenar bruscamente. Para evitarlo, es fundamental manejar a velocidades constantes todo lo que se pueda y subir de cambio cuando el motor gire entre 2.000 y 3.000 rpm, excepto en condiciones de sobrepaso (en esa situación, es indispensable el rebaje).

Administrar el uso del aire acondicionado. El consumo de combustible sube hasta un 10 por ciento cuando el aire está prendido sin necesidad. En ciudad, dentro de lo posible, se aconseja apagarlo y circular con la ventanilla baja para ventilar el habitáculo. En ruta, la ecuación cambia: lo que te ahorrás por no prender el aire lo gastás por tener la ventanilla baja, ya que a velocidades elevadas empeora la aerodinámica (el viento entra y hace fuerza en contra) y el motor debe hacer más esfuerzo.

Cargar únicamente lo necesario. El auto necesitará más combustible cuanto más peso en equipaje y ocupantes tenga que mover, ya que tendrá que trabajar más el motor. Dos autos iguales, en el mismo camino y en las mismas condiciones, pero con peso desparejo gastarán distinto. Otro punto clave: en lo posible, no llevar objetos en el portaequipajes porque, además de sumar peso, altera la aerodinámica.

Mantener el auto en buen estado. Realizar los servicios programados en tiempo y forma, tener el auto balanceado y alineado, y no circular con piezas mecánicas rotas o desgastadas es fundamental para que el motor no gaste de más, además de generar seguridad.

Ponerle a los neumáticos la presión adecuada. Los especialistas dicen que el 20 por ciento del gasto de combustible es provocado por la resistencia a la rodadura de los neumáticos. Es fundamental inflarlos con las libras que indica el fabricante (en el manual del auto lo dice y, generalmente, también en las puertas) para distintas condiciones, ya que no se requiere la misma presión en ciudad, en ruta o en el off-road.