Río Grande.- El secretario general de ATE, Carlos Córdoba, volvió a anticipar un frente de conflicto a partir de la asunción del gobernador electo Gustavo Melella, de no abrirse las paritarias y avanzar con la recomposición salarial. Además espera que antes del final de la gestión de Rosana Bertone se cumpla con el compromiso de ingresar a planta a 91 trabajadores de planes PEL y varios contratados. “Están entrando algunos compañeros y nosotros hemos solicitado la incorporación de 91 planes PEL y de compañeros que hace bastante tiempo están contratados en salud, y son enfermeros, técnicos, algunos de mantenimiento y de la parte de mucamas”, detalló de la lista de nombramientos pendientes.

Consultado sobre los ingresos de personal político, dijo que “no lo tienen registrado” y barajó que los datos que han dado a conocer las autoridades electas “deben surgir del boletín oficial o pueden ser comentarios de compañeros de otros sectores”.

“El sábado tuvimos una reunión con el gobernador electo Melella y hablamos de un montón de cuestiones. Le informamos que estamos escribiendo el convenio marco dentro del escalafón seco y húmedo, y la apertura de los convenios que tenemos en el IPV, en la OSEF, en Rentas. Dijo que no lo sabía pero se lo dijimos nosotros, que desde 2007 estamos intentando terminarlo. Si se da la oportunidad, la vamos a aprovechar. Se está armando algo como para poder subsanar la situación de los trabajadores estatales, para que tengan carrera administrativa, los ascensos como corresponde y sus categorías en tiempo y en forma, una cosa que este gobierno nunca lo llevó a cabo”, expresó.

“Esta fue la primera reunión con el gobernador electo y el 18 tenemos otra. Yo pedí una reunión con todo el cuerpo de delegados para que él se pueda informar de lo que está pasando dentro del estado. Se va a poder llevar de cada uno de los sectores los problemas que existen. También hablamos de la situación económica de la provincia y del país, pero más de la provincia”, apuntó.

En cuanto al reclamo de aumento, Melella dijo que “estaba con ganas de cumplir con lo que había dicho en campaña. Estaba viendo la posibilidad de dar un aumento salarial a todos los estatales. Dice que tiene que ver los números, hablar con la gente de economía de él. Creo que a mediados de diciembre ya tiene que tener alguna novedad”, sostuvo del plazo que le estaría dando el gremio.

“Nosotros le dijimos que ya no se aguanta más eta situación y casi un 90% de los trabajadores estatales están bajo el nivel de pobreza. La situación del escalafón seco es desesperante y el 23% que se dio por fuera del básico no ha llenado las expectativas bajo ningún sentido”, manifestó.

“Nosotros tenemos 34 puntos acordados del convenio y eso se puede ver de inmediato, tenemos compañeros paritarios que están escribiendo el resto y tratando de armar este marco. Ya para diciembre va a estar el gobernador en funciones y dijo que íbamos a conversar, que no había problema siempre que fuera bueno para los trabajadores estatales. Esperamos poder terminar el año con un convenio, escalafón nuevo y carrera administrativa”, fijó como meta para el corto plazo.

Con el gobierno saliente sigue la paritaria abierta y habrá una reunión este jueves. “Esperamos ponernos de acuerdo para ir al Ministerio de Trabajo directamente y homologar. No se habla de incremento salarial en esta mesa, aunque sería ideal que fuera así. Por ahora es convenio colectivo y condiciones de trabajo. Lo bueno para los trabajadores estatales es que ya tenemos el antecedente de Obras Públicas donde se creó el departamento den higiene y seguridad, que es muy necesario para todos los trabajadores”, apuntó sobre una nueva área de gobierno.

Consultado sobre lo que puede ocurrir si Melella demora el aumento salarial, ratificó las declaraciones de Marcelo Córdoba respecto de una situación de conflicto en diciembre. “Nosotros le dejamos a Gustavo Melella la línea de trabajo nuestra y es que el que avisa no traiciona. En  la parte política no molestamos, pero lo que necesitamos es regularizar la situación de los trabajadores rápidamente, porque una guardia de un compañero del hospital son 88 pesos de bolsillo y es una vergüenza”, concluyó.