“Llegue tarde al estudio porque me tope con una movilización de las mujeres” se quejó el Intendente Gustavo Melella al aire en una entrevista que a todas luces se vio como una publinota paga, en la pantalla del sensacionalista Crónica TV.

Como si las marchas lo hubiesen molestado y a contramano de la dirigencia política que se corrió del escenario para darle paso a los reclamos de las mujeres. Melella intento ocupar el centro de la escena, relatando sus problemas domésticos en un canal nacional.

Según fuentes confiables, la publinota de Melella en Crónica TV habría costado una friolera de miles de dólares, con el objetivo de revertir su imagen nacional, después que varios medios de gran alances, se hicieron eco de sus andanzas sexuales.

Lo cierto es que en el día Internacional de la Mujer, Melella se ganó el mote de “machirulo”, “Hubiésemos querido que el Intendente nos ayude con las movilización y que este acá en Río Grande apoyándonos en lugar de estar en un canal de Tv haciendo declaraciones sobre sus problemas… alguien le debería avisarle al Intendente que hoy las mujeres somos las protagonistas y no él “ se quejó Noemi Giménez, ante un cronista radial que cubría la marcha en Río Grande.

Está claro que para Gustavo Melella, las intenciones de limpiar su imagen política a nivel nacional, está por encima de los múltiples reclamos de las mujeres. Tratar de ponerse en el centro del escenario, cuando en realidad, ningún dirigente político de importancia sea nacional, provincia o municipal apareció en los medios, es cosa de “Machirulo” un mote bien ganado en una triste realidad.

La opereta millonaria

La necesidad de limpiar su imagen y al mismo tiempo buscar aliados políticos en el escenario nacional, es una obsesión que el Intendente lo tiene a mal traer. La cifra que pago al supuesto operador político que le acercara el diputado Gastón Roma, es estremecedora, sobre todo si ese dinero salió de las arcas municipales.

Semanas atrás varios medios y portales de la provincia se hicieron eco por el desembarco de Jorge Molina como supuesto operador del Intendente, un personaje de dudosa reputación y pasado. Las crónicas cuentan que Molina llegó al despacho de Melella de la mano del diputado Roma. Un repaso sobre el pasado de Molina basta para entender sobre que manos deposito Melella la tarea de operar sobre los medios y periodistas nacionales, con el fin de conseguir espacios para la operación “limpieza”.

Jorge Molina hoy figura como empleado de la Auditoría General de la Nación. Pero en el pasado trabajó ocho años en TBA (Trenes de Buenos Aires) lo que le significo un procesamiento judicialmente por el Juez Ercolini junto a Jaime, Cirigliano, Manuel y Julián Vázquez por el escándalo de las coimas del ex Secretario de Transporte. En su paso por Aerolíneas Argentina no le fue mejor, allí fue escrachado por haber sido operador en las sombras de compañía española (Marsans) que controlaba Aerolíneas y que fue sindicada como la principal culpable del vaciamiento de nuestra empresa bandera.

Hay un hecho que lo pinta de cuerpo y alma al flamante operador de Gustavo Melella. En plena pelea del Gobierno kirchnerista por estatizar la aerolínea de bandera, Molina salió en varios medios periodísticos buscando escrachar a Ricardo Jaime por pedir dádivas. La denuncias públicas no tuvieron credibilidad, luego se supo que el Juzgado Criminal y Correccional de Ercolini, el investigado era él por integrar una trama de corrupción junto a Jaime y otros personajes que hoy están presos.

La realidad de hoy, lo encuentra a Molina apoyando las medidas de ajustes y levantando las banderas del PRO, de allí su relación con el diputado Gastón Roma, puente para que este personaje desembarque en el despacho de Melella con la promesa de limpiar el nombre y honor del Intendente.

Operación pinza

Buscar espacio en los medios nacionales es un obsesión del Intendente Melella, sabe que para encontrar referentes que lo apoyen en su campaña para gobernador, primero tiene que instalar su versión de los hechos que lo tienen imputado en la Justica por acoso sexual. Al mismo tiempo Melella busca rodearse de dirigentes nacionales que llenen el “vacío” que le dejó el FpV y la Cámpora.

Sus intento por reabrir las puertas del “Instituto Patria” y sacarse una foto con Cristina fueron en vanos, la repuesta vino del propio Oscar Parilli, “Melella es bienvenido al Instituto, pero tiene que hacerlo entendiendo que hoy, los que somos del campo nacional y popular estamos todos juntos para enfrentar el brutal ajuste del gobierno de Macri… no queremos divisiones” dijo el exfuncionario cristinista.

Lo cierto es que en la operación denominada pinza, se buscaron por un lado medios nacionales para instalar la versión del propio Melella sobre la causa judicial, por otro se buscó sumar a dirigentes nacionales que lo apoyen en su derrotero hacia la gobernación. Por el momento solo cosecho la foto junto a Martín Sabbatella, un dirigente periférico que impulsó la Ley de Medios, un engendro que nunca llegó a nada. Lo cierto es que en la actualidad el armado político de Melella no tiene una figura “destacada” o cuando menos importante a nivel nacional que acompañe su proyecto provincial. ¿Es posible impulsar un proyecto político para gobernar Tierra del Fuego cuando no se tiene en sus filar alianzas firmes con algún sector importante de la políticas nacional?  máxime teniendo en cuenta de las “necesidades” fueguinas que depende en mucho de las negociaciones con el poder central. Melella es consciente de la realidad que lo invade, tal vez en esa realidad se encuentre el justificativo de pagar una cifra millonaria y en dólares por cinco minutos al aires en un canal nacional y sin importar las marcha de las mujeres que ese día invadieron cada rincón del país.

Un “machirulo” en el día de la Mujer

El mote de "machirulo" lo popularizo Cristina Kirchner cuando lo llamo así a Macri en unas de sus habituales enfrentamiento.

Lo cierto es que Machirulo, es un término que se usa en la jerga del feminismo contemporáneo para definir al hombre con poder que no tiene problema con ser machista.

Los conocedores dicen que surge de la mezcla entre "machista" y "chulo", como llaman a los proxenetas en algunos países.

Con esta palabra se refirió la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner a Mauricio Macri, después de que el mandatario calificó sus posturas de "locuras" en medio de una polémica por el alza de las tarifas, la crisis económica y los derechos de las mujeres.  "Tratar de loca a una mujer. Típico de un machirulo", escribió en su cuenta de la red social.

Hoy ese mote de “machirulo” se lo lleva Gustavo Melella, por intentar sobreponerse a las marchas y reclamos feministas. Melella en el día de la Mujer quiso ser más que ellas.