Procesando. Por favor aguarde...
También se les entregó un reconocimiento a las talleristas que desinteresadamente ofrecieron su tiempo para hacer de la casita Stella Maris un lugar de encuentro y aprendizaje.
Río Grande.- En la oportunidad se compartió un té y se pudieron ver los trabajos mediante la exposición de los diferentes productos que se lograron realizar. Además se entregaron diplomas a las alumnas que participaron de los talleres.
También se les entregó un reconocimiento a las talleristas que desinteresadamente ofrecieron su tiempo para hacer de la casita Stella Maris un lugar de encuentro y aprendizaje.
Al respecto la coordinadora de los cursos, Sonia Zelaya de Bueno agradeció la participación de todos. “Estoy muy satisfecha porque creo que el objetivo de aprender y compartir se logró. La casita fue sobre todo un lugar de encuentro. Les agradezco por todo el apoyo brindado”.
También las profesoras y alumnas le entregaron un presente a Sonia en agradecimiento a su predisposición y trabajo constante en la casita.
Las alumnas destacaron la importancia que tuvo la casita para hacerse amigas y compartir un espacio donde se conocieron y aprendieron, “fue muy lindo generar vínculos con otras señoras que tal vez viviendo en el mismo barrio no nos habíamos encontrado”, expresaron.
Por su parte las talleristas encontraron un espacio para compartir sus conocimientos, “la casita me dio esta gran oportunidad de saber que puedo enseñar”, destacó la profesora de muñecos soft y costura Fabiana Ramirez .
Cabe destacar que durante el año se realizaron talleres artesanales de Muñecos soft, Pintura decorativa, Telar, Porcelana Fría como también talleres deportivos como Hándball, Zumba, folclore, Yoga y fútbol infantil y de oficios como peluquería y organización de eventos.
Los mismos se dictaron en la Casita de la Obra Taller y en las instalaciones de la Agrupación de la Infantería de Marina Río Grande en horarios de la tarde.
COMENTARIOS