Sergio "Maravilla· Martinez hará temporada en Carlos Paz con un espectáculo de stand up. Allí contará su vida a través del humor y el drama. Conjugando lo que le sucedió en su etapa viviendo en Quilmes hasta su vida de estrella en España y Las Vegas.
 
"En enero del 2013 estaba dando charlas motivacionales y me di cuenta de que la gente me prestaba atención", aseguró. Así fue el punto de partida para la obra "A veces me dicen Maravilla", que estará todos los martes en el teatro Holidey.
 
El quilmeño explicó que siguió a su idea inicial de contar su experiencia arriba de un escenario. "Se me ocurrió traer un relato de un amigo español que se llama Hovik Keuchkerian. Me propuso que escribiera mi vida con algunos consejos suyos. Él tocó fondo como yo pero de otra manera. Me puse a escribir y así fue cómo surgió todo", sostuvo.
 
Para "Maravilla" el boxeo y la actuación están relacionados aunque el deporte genera heridas más duras. "Lo que tiene de malo el boxeo es que si te distraés te pueden lastimar y hacer daño. En el escenario podés no conformar a la gente y ahí sí que podría ser doloroso, pero no te pega nadie como en el ring", admitió.
 
"En el escenario voy a estar una hora yo sólo frente al micrófono haciendo pasajes de mi vida: algunos con humor, otros con un poco de poesía a mi estilo y un poco de drama", dijo sobre la idea del espectáculo. Martínez admitió que la obra tiene pasajes muy duros en los que "a veces se me caen las lágrimas".
 
El quilmeño comparó la experiencia de estar arriba de un ring con la de tener que subirse a las tablas para hablarle al público. "Traigo 20 años de experiencia en el boxeo y la actuación se parece mucho al boxeo. Estar en el escenario para mí es algo natural, en el ring llegué a tener mucha gente alrededor", argumentó.
 
"Maravilla" se sinceró y asumió que nunca se imagino esta etapa de su vida cuando empezó a boxear, aunque en los últimos años empezó a diagramar un futuro con actividades abajo del ring. Ahora intenta adaptarse al mundo del espectáculo donde los rumores son constantes y los posibles romances con mujeres del ambiente ya comenzaron a aparecer a su alrededor.
 
Sobre su futuro deportivo dejó algunas líneas que avisoran un improbable regreso en el corto plazo. "Hace tres días entrené por primera vez después de la pelea con Miguel Cotto. Me lastimé la rodilla y me está aplastando. Me está ganando por paliza, me veo al espejo y digo: '¡Madre mía me comí a mi mismo!'", afirmó en referencia a su estado físico.
 
"No hago nada más que estar sentado leyendo. Cuando comience a actuar voy a bajar mucho de peso", reconoció el campeón argentino que comenzó a pensar su vida lejos de ring y más cerca de los escenarios.