Rossi sabe que la decisión de los ediles es en el marco d ela campaña electoral y por eso es que tiende un manto de duda sobre la medida. “Por ahí se declara un estado de sitio”, ironizó el funcionario riograndense, y sostuvo que “es una cuestión rarísima que se prohíba un acto público”.

“Una de las obligaciones del estado es hacer públicos los actos de gobierno y, cuando se inaugura una obra, es para que toda la población sepa lo que se está llevando adelante”, subrayó.

“Estamos sorprendidos desde el Ejecutivo por este proyecto”, admitió el Secretario.

“En estos tiempos en los que se garantiza la libertad de expresión y la democracia, es muy raro”, insistió y lamentó “haberse enterado por los medios de este tema”, votado por unanimidad en la segunda sesión ordinaria.

“Los concejales siempre nos han acompañado en los actos y si algo nos caracterizó como Ejecutivo es ser agradecidos primero y ampliamente participativos en los actos públicos, porque cuando inauguramos una obra es fundamental el Concejo Deliberante también en el proceso”, concluyó.

Con los fundamentos y el texto en mano, se decidirán los pasos a seguir. Ante la unanimidad de la aprobación no hay margen para veto por la alta probabilidad de insistencia y una realidad que marca que “no tenemos ninguno adentro” dijo Rossi sobre la inexistencia de un representante del oficialismo.