Río Grande.- La presidente de la convención constituyente Mónica Urquiza adoptó un discurso de barricada para defenderse de la sucesión de cuestionamientos por dentro y por fuera de la convención, en función de su acompañamiento al oficialismo municipal.

Ayer mantuvo una reunión en un cuarto intermedio con Walter Vuoto, según reveló Javier Branca, y en la primera jornada de la sesión ordinaria se observó una actitud similar que le valió un pedido de explicaciones de parte de Liliana Fadul.

Por Radio Nacional Ushuaia sostuvo que son “todas chicanas”, y que el cuarto intermedio se extendió porque “el personal tenía que almorzar”.

A modo de balance del extenso debate del miércoles, dijo que “tratamos 36 artículos y nos quedaron 32 -para la jornada de ayer-, así que pudimos ir avanzando. Hay muchos que fueron aprobados por unanimidad, otros por mayoría con 10 votos a 4, con 9 a 5, con 8 a 6, es decir que hubo variedad. No es que algunos no votamos nada y otros votamos todo, por la negativa o la positiva”, expresó.

“En la comisión temática se intentaron lograr los consensos y yo fui una de las que sostuvo que no era momento de modificar la carta orgánica, pero fuimos elegidos y el trabajo hay que hacerlo de la mejor manera posible. Había muchos convencionales que al principio decían que no iban a votar nada con Vuoto, y lo han hecho, pese a que lo nieguen”, se defendió ante las críticas por su cercanía con el oficialismo.

“Hay mucha chicana y algunos están nerviosos porque se llenan la boca con algunas cosas y lo que pasa en realidad es que están empezando a perder privilegios”, dijo, en referencia a las críticas que sumó el concejal Ricardo Garramuño.

El edil había expuesto que Urquiza acompañó el aumento del gasto del Concejo Deliberante, al poner el tope del 8%, porque actualmente representa el 5,5% del presupuesto y se van a gastar 600 millones más en la política. “El artículo 125 sobre atribuciones y deberes del Concejo Deliberante se trabajó mucho, tiene más de 40 incisos, y desde el bloque del MPF pudimos poner un límite al gasto del Concejo Deliberante”, aseveró, y aclaró que el hecho de que ese tope supere el gasto actual “no significa que a partir de mañana o pasado tengan que gastar eso. El Concejo va a tener que elaborar su propio presupuesto, decir en qué lo va a gastar y remitirlo al Ejecutivo para que lo incorpore. Lo mismo hicimos con la Sindicatura, que tiene el control sobre los gastos del municipio. Quedó en la misma situación que el Tribunal de Cuentas de la provincia: ellos elaboran su presupuesto, lo remiten al Ejecutivo y el Ejecutivo lo incorpora. Además (el Tribunal de Cuentas) debe enviar una copia a la Legislatura, para que no sea el Ejecutivo el que diga sí o no a lo que van a gastar, sea quien sea, y en este caso la Sindicatura al intendente. Esto también lo incorporamos al Concejo Deliberante y evidentemente estamos pisando algunos callos, porque uno busca datos de cómo fue creciendo la estructura del Concejo Deliberante”.

“Si hacemos memoria, en 2015 fue histórico porque asumieron siete concejales varones y en la misma sesión se aprobaron un incremento de siete plantas de gabinete, coordinadores y demás. Algunos preguntan cuántos asesores tienen los concejales y parece que es un secreto a voces, y por eso algunos se están preocupando. Otros presentan proyectos para poner límite a la cantidad de asesores pero a partir del 2024, porque dentro de una semana vuelven al Concejo”, agregó, sin dar nombres.

“Estas discusiones son chicanas muy bajas, y el grueso del presupuesto de la ciudad está en el Ejecutivo municipal”, observó.

“Golpes bajos” y “falta de respeto”

Urquiza se quejó de los “golpes bajos que son innecesarios, la falta de respeto, el estar permanentemente chicaneando”, y citó como ejemplo el cuarto intermedio que pidió el convencional Coto el miércoles y se demoró bastante, generando suspicacias de acuerdos bajo la mesa.

“El personal que está trabajando también tiene que descansar un poco, los que están escuchando y tomando la versión taquigráfica tienen que almorzar, y sabíamos que la sesión iba a ser larga.La verdad nos chicanearon a todos, midiéndonos y pidiéndonos explicaciones”, expuso sobre los reproches de Fadul por la demora del cuarto intermedio.

“Además ellos estuvieron ahí comiendo, porque la gente que va con ellos les llevó la comida, y yo le aclaré que el personal había estado almorzando.En un momento manifesté que habíamos retrocedido 20 años, porque hay que leer las discusiones y las posturas en las versiones taquigráficas, y los modos son exactamente los mismos. Son cosas que van sumando, una gotita acá, otra gotita allá. Un tercio con seguridad no está para nada de acuerdo conmigo, otro puede estar de acuerdo, y hay otro que por ahí está atento a lo que estoy haciendo y puede llegar a estar de acuerdo”, indicó sobre los tres sectores en que ve dividida la convención.

“Esto es lo sano de la democracia, pero no nos podemos faltar el respeto y esas son las cosas que me sacan, porque se meten permanentemente a cuestionar y, si uno no piensa igual, es el enemigo y está mal, es malo, uno es el que mintió y no hay término medio.Yo me hago cargo de lo mío y he sido totalmente responsable, todos saben quién soy y, quien quiera venir a pedirme explicaciones, vivo en la misma casa hace 35 años, me van a ver en la calle, en el supermercado, haciendo mi vida normal”, afirmó.

Garramuño “apoyó a Bertone”

En una devolución de reproches por las críticas a través de los medios, sostuvo que hay cosas que Garramuño “no puede explicar. Yo participo de un partido político en el que todos tenemos derecho a opinar y hay cosas en las que pensamos distinto. Si pensamos distinto, me lo pueden plantear y por ahí me hacen cambiar la visión del tema, o tal vez le explico cómo fue al que me está reclamando. También hoy están las redes sociales donde se dan vuelta las cosas”.

Mencionó que en el armado político con miras a las elecciones de convencionales, a Ricardo Garramuño se le ofreció uno de los primeros lugares de la lista para que participe y no lo quiso hacer. “Es así, y no solamente eso, sino que plantearon que estaban más cerca de Juntos por el Cambio y después apoyaron a Republicanos. La verdad no sabemos dónde están. Siempre se les ofreció y las puertas del MPF están abiertas para que todos sean candidatos. Ya dije en varias oportunidades que el sector de Ricardo Garramuño no nos apoyó en la coalición de gobierno con Gustavo Melella, donde estamos ocupando la vicegobernación, porque él apoyó a Rosana Bertone en su primer mandato y en su intento de un segundo”, enfatizó.

“La verdad que uno siente vergüenza ajena de que un concejal diga que no tiene idea del gasto del municipio, de los recursos y demás. Yo fui legisladora de la oposición con Rosana Bertone y la información que no me llegaba oficialmente la conseguía con las herramientas legales que tenemos a disposición. Hay cosas que no tienen justificación, pero este es el juego”, se resignó.

La “confianza en la gestión”

Otra expresión de Fadul a la que hizo mención fue que le dijera que tiene “mucha confianza” en la gestión actual, por negarse a incorporar un jurisdiccional para establecer el monto de la compra directa en una ordenanza. “Con la inflación que tenemos hoy, no se puede. Uno ha estado en el Ejecutivo y tuve la oportunidad de tener la experiencia de ver cómo pasan las cosas todos los días. Con esto yo no defiendo ninguna gestión de otro, defiendo la mía. Fui cuatro años Secretaria de Hacienda municipal y no tuve ninguna denuncia”, resaltó.

“Nosotros planteamos cosas importantes de la carta orgánica, y algunos se fijan solamente en su quinta. Nosotros planteamos por ejemplo el referéndum para la concesión de servicios públicos por más de diez años, el referéndum para la ampliación del ejido municipal, que Más Ushuaia lo había sacado en su proyecto. Desde nuestro bloque insistimos para que quede como estaba. Estas son las cosas que tenemos que defender, y después hay muchas cosas que se controlan desde las ordenanzas y además desde la actitud de cada uno”, consideró.

“Esta es una convención muy rica desde lo personal, porque me toca trabajar con personas mucho más jóvenes, que tienen otra visión, con personas que no vienen del ejercicio de un cargo político, y uno aprende todos los días. El ser oposición no es ser enemigo, no es lineal”, explicó de su flexibilidad pese a haberse presentado como opositora.

“La convencional Fadul me chicaneaba diciendo que ella nunca había querido aceptar un cargo designado, y que siempre sus cargos fueron electivos. Yo la felicito. Yo he ocupado cargos electivos y designados, y agradezco la confianza que me han tenido para designarme en esos cargos. La responsabilidad es doble no sólo por lo que yo hago, sino porque la gente votó a esa persona que está poniendo la confianza en mí. Lo mismo para ser asesor o funcionario. Hay unas chicanas permanentes en este sentido y yo lo tomo como una falta de respeto a la gente”, sentenció.

La incursión en el sector privado

Por otra parte se refirió a la votación de 9 a 5 para el artículo que incursiona en el sector privado, con un mandato a las empresas que quieran contratar con el municipio de implementar la perspectiva de género. En este caso se rompió el 10 a 4 usual, donde la negativa corresponde a los tres convencionales de Somos Fueguinos y a Javier Branca, porque “no lo votó el convencional Coto. Él lo fundamentó y en este caso se agrega al artículo que una ordenanza propenderá a que las empresas se capaciten y trabajen con perspectiva de género, pero él no estuvo de acuerdo y tampoco acompañó el consejo juvenil”, dijo.

“Todo se ha discutido y cada uno tenemos nuestra posición. Hemos ido buscando los consensos y a veces uno va dejando algunas cosas y acomodando otras. Todos los bloques hemos puesto nuestra mirada, que es lo más importante”, destacó.

Admitió que en algunos momentos decidió poner un freno a “las chicanas” en su contra. “Uno trata de no prestar atención a las chicanas pero a veces tiene que responder, porque es más fuerte que uno, y además uno tiene argumentos para contestar”, dijo.

Vacaciones extendidas

También se refirió al cambio de la fecha del inicio del período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante, que ampliará el receso de los ediles. En lugar del 15 de febrero se extendió al día 28 de ese mes. “Esto coincide con el 1 de marzo que es el inicio de las sesiones de la Legislatura provincial”, defendió Urquiza.

Ademásacompañó la ampliación del plazo para presentar el proyecto de presupuesto de cada año por parte del Ejecutivo, al 15 de octubre. “Esto se corrió por una cuestión práctica. Estamos hablando de la carta orgánica y nuestro país tiene muchos vaivenes. Los primeros días de noviembre se va a empezar a tratar en la Legislatura el presupuesto provincial y prácticamente va a haber que recibir uno nuevo para comenzar con el análisis. Hay que ir manejando los tiempos y es importante ir aperturándolos. En la provincia el presupuesto se presenta el 31 de agosto por Constitución y el 30 de septiembre se presenta el nacional. El municipio tenía esa fecha y llegaba ajustado tratando de conseguir datos hasta último momento, que uno no los tiene, por eso se le dieron esos 15 días más”, explicó.