El presidente electo Alberto Fernández se recluyó unos días para armar su Gabinete y preparar un acto en la Plaza de Mayo el 10 de diciembre, fecha en la que jurará como mandatario.

La normativa establece que esa fecha Cristina Fernández, como presidente de la Asamblea, tomará el juramento del presidente electo y Mauricio Macri le hará el traspaso de los atributos presidenciales.

Luego del mensaje a la asamblea legislativa, el punto de atención se moverá a la Casa Rosada, donde jurará el Gabinete y Alberto Fernández dará su primer discurso desde el balcón.

Si bien todavía no hubo una convocatoria formal, desde el albertismo sugieren que "quienes quieran ir a acompañar, que vayan a plaza de Mayo: Alberto va a hablar desde Casa Rosada", según indicó Clarín.

Desde el PJ aseguran que será un acto "majestuoso" con "muchísima gente", ya que "en la calle hay mucha expectativa y hay que celebrar la llegada de Alberto sabiendo que, desde el 10, hay que gobernar con todos".

El Frente de Todos aseguran que movilizarán o facilitarán que la gente vaya a acompañar en la jura del nuevo presidente. Con la vuelta del peronismo al poder, se espera una larga fila de gobernadores –no sólo del PJ– en la ceremonia.

Por su parte, Macri prepara para el 7 de diciembre su despedida en la que hará valer los 40 puntos conseguidos en las elecciones para conformarse como jefe de la oposición.

Así, imitará el acto que el 9 de diciembre de 2015 realizó Cristina Kirchner antes de dejar la presidencia, previo a la transición traumática con Macri.

El albertismo intentará imprimir en la calle la épica del regreso, el relato de la campaña de "Argentina de Pie" y el concepto nestorista de "un hombre común con responsabilidad extraordinarias".