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A 50 días de la gestión Vuoto, el secretario de Gobierno del Municipio de Ushuaia, Oscar Souto, expuso el panorama general que, en detalle, brindará hoy el jefe comunal en la apertura de las sesiones ordinarias.
Río Grande.- A 50 días de la gestión Vuoto, el secretario de Gobierno del Municipio de Ushuaia, Oscar Souto, expuso el panorama general que, en detalle, brindará hoy el jefe comunal en la apertura de las sesiones ordinarias.
“Ushuaia está como se la ve, lamentablemente. Podrán notar el mal estado de las calles en general, desde el centro a los barrios más alejados. El servicio público de pasajeros es inexistente y en general hay una deuda que llevó una larga discusión entre el intendente Vuoto y las autoridades salientes, pero hay 200 millones de pesos comprobados”, aseveró de la herencia recibida al programa ‘Dos Preguntan’ que se emite por FM Universidad 93.5.
“La comisión revisora en los próximos días termina su actuación y podremos conocer la actuación de la gestión en el último año sobre todo”, informó, a la espera de esos resultados que podrían derivar en acciones judiciales, de comprobarse irregularidades.
Durante la transición, no hubo posibilidad de acceder a la información veraz, sostuvo: “Hay información que está en un sistema informático de la Municipalidad y hasta último momento no estaban cargadas el 90% de las deudas que encontramos y vamos a hacer públicas. Estamos viendo lo que corresponde por redeterminación de precios, en este caso de Agrotécnica por la recolección de residuos, que son más de 40 millones de julio de 2014 a diciembre de 2015”, precisó.
“Esa deuda no estaba cargada, había un reclamo de agosto y otro de noviembre. Estamos conversando en muy buenos términos con la empresa y hemos expresado con extrañeza por qué estos reclamos no se hicieron durante casi un año y medio y surgen con fuerza cuando nosotros asumimos la gestión”, dijo.
En obra pública, la deuda también es importante. “Solamente por los trabajos tercerizados que se hicieron en el invierno, para paliar la situación provocada por las nevadas intensas, hay 48 millones de pesos. Hay 11 millones que reclama una sola empresa de las que trabajó en el Shopping a cielo abierto de calle San Martín. Eso, sin contar con toda la deuda que nos han dejado por este edificio sin poder utilizar, que todavía no tiene ni baños ni vestuarios habilitados, que es el polideportivo del Cochocho Vargas”, agregó.
Admitió que “es una deuda legítima” la reclamada por la empresa que hizo la obra de la calle San Martín, y “hay otras empresas que están reclamando, sobre todo del polideportivo, que tenía aprobados 23 millones de pesos, luego se extendió a 40 y ahora nos enteramos que se gastaron 60 millones”.
También dijo que “hay cooperativas que reclaman, la empresa autobuses Santa Fe reclama subsidios municipales. Ellos reclaman un millón y medio y nosotros hemos certificado 600 mil. Además la empresa debe cuatro millones en multas por servicios no cumplidos e infracciones de tránsito. Ahí tenemos un activo a favor de la municipalidad”.
De las cooperativas de trabajo, afirmó que “hay varios meses impagos, desde limpieza de edificios públicos a pequeñas obras que se han hecho en los barrios”.
“La propia empresa que controlaba que no se ocuparan las tierras reclama deuda de todo el año 2015. Así seguimos sumando”, apuntó sobre Magi-Mar, y reiteró que “es una deuda que pasó largamente los 160 millones de pesos”.
Planta excedida
En cuanto a la planta de personal, dijo que “son 1.100 empleados de planta permanente más 480 empleados en distintas modalidades de contratación, que van de contratos administrativos, locación de servicios y las mal llamadas pasantías, que son en realidad unos convenios de formación del empleo. Hemos regularizado estas formas de contratación y trabajamos hasta el lunes de la semana anterior, cuando se firmó un convenio con todos los gremios con actuación en el municipio, para regularizar la situación y atenernos al convenio municipal, que autoriza hasta un 7% de personal contratado”, recordó, en tanto esta modalidad “rondaba el 20%”.
No obstante “decidimos dar regularidad al personal que estaba en situación irregular, porque es personal que necesita la Municipalidad para su funcionamiento”, destacó de la decisión de no echar a nadie.
“Nosotros tomamos todo el personal y hemos sostenido el compromiso que hicimos con los gremios. No se ha echado a nadie de la Municipalidad de Ushuaia salvo alguna irregularidad manifiesta”, expuso.
Se le consultó sobre la buena relación que tuvo Walter Vuoto con el ex intendente Sciurano, cuando era concejal, y explicó que “la relación fue de acompañamiento a las cosas que requería el intendente, más allá de que no siempre se tenía el mismo criterio respecto de la necesidad de cada obra”.
“Hace 20 años que el peronismo no gobernaba la ciudad de Ushuaia y esto se nota, porque el peronismo tiene otros criterios para encarar la obra pública”, diferenció.
La prioridad estará en la gente: “Hemos reunido durante diez días a los vecinos inscriptos en el plan de tierras en pleno verano, en enero. Se presentaron 6500 vecinos que en algunos casos hace doce o quince años llevan inscriptos y no han tenido respuesta. Esto se ve en el crecimiento desordenado que tuvo la ciudad, con vecinos viviendo en situaciones muy precarias. La ciudad se desarrolló hacia la montaña por no haber una política de tierras planificada, y en Ushuaia hay una gran falta de planificación en su crecimiento”, cuestionó.
Agua y cloacas
El mayor déficit está en los servicios básicos y en este punto Souto recordó que “uno de los motivos de discusión con el anterior intendente fue el no acatamiento al fallo del juez Fernández, que le daba responsabilidad sobre un sector de la ciudad, que es el sector más céntrico y comprende la bahía Encerrada. La provincia acató este fallo, el intendente no quiso y finalmente hubo que hacerlo. Nosotros ya veníamos trabajando para hacernos cargo de las obras de cloacas y agua, porque debe ser una tarea municipal”, expresó sobre el traspaso.
“El intendente Vuoto lo conversó con la gobernadora Bertone. Guillermo Worman se ha hecho cargo de la dirección de obras sanitarias provincial para provocar el traspaso de aguas y cloacas a la Municipalidad de Ushuaia y del relevamiento costero, porque toda la costa está en muy malas condiciones. Nos estamos haciendo cargo de esto y pensamos que es el municipio quien debe hacerlo. Lo estamos haciendo en forma ordenada, junto con el gobierno provincial y estimamos que en un año nos haremos cargo de las obras de cloaca y agua”, barajó del plazo concreto del traspaso.
A la falta de agua se suma la mala calidad y el costo, el más caro de la Patagonia a razón de 23 pesos el metro cúbico. “Se presentó a la dirección provincial de obras sanitarias un trabajo que mostraba el derroche de agua por obras que no se han hecho, donde hay importantes roturas de la red troncal. Son nueve puntos en distintos lugares de la ciudad”, respondió sobre la desidia de los últimos tiempos.
“El valor es muy alto y se sufren casi en forma permanente los cortes. Hay construcciones donde el agua no sube porque no tiene la presión necesaria. No es un tema menor y hace veinte años no se hacen obras importantes de agua y cloacas. Las últimas zonas fueron La Cantera, Los Morros, el barrio San Vicente, de la gestión Daniele. Es recordado por todos y a eso nos tenemos que abocar”, insistió.
“Nos va a llevar un año para transferir la DPOSS, pero mientras tanto se trabaja con el gobierno provincial y, por primera vez en muchos años, hay coincidencias en cómo se debe llevar adelante el estado. Estamos aprovechando para avanzar en los temas comunes”, valoró.
Pavimento en marcha
Consultado sobre el plan de pavimentación, dijo que “teníamos un plan y estamos conversando con el gobierno de la provincia, por una deuda de 20 millones que tiene con la ciudad. Están avanzadas las conversaciones y supongo que en pocas horas la provincia lo va a hacer efectivo. Todo ese dinero va a estar destinado a obras de repavimentación, porque hay calles que no se pueden seguir bacheando. Hay otros lugares que se pueden ir remediando y esta semana empezamos de manera más firme”, informó.
La demora se debe a “la situación económica que encontramos y la imposibilidad de endeudamiento de forma inmediata”, explicó.
“En la última sesión del anterior Concejo, autorizó a esta nueva gestión a hacer un leasing, que es una especie de alquiler por tres años, luego de lo cual la maquinaria termina pasando a la órbita municipal. El leasing es de cien millones, para comprar maquinaria para movimiento de tierra, sacar nieve en invierno, camiones de transporte, porque cuando tomamos la municipalidad, Servicios Públicos tenía una retroexcavadora y un camión”, dijo.
Souto cuestionó “el estado de abandono en que estaba” y aseguró que hoy “los trabajadores municipales están bacheando la municipalidad ellos mismos. En los últimos años se gastaron 48 millones en empresas tercerizadas para un trabajo que hoy eficientemente hacen los trabajadores municipales. Ellos no eran los responsables políticos de no tener herramientas, máquinas ni ropa adecuada. Va a ser un trabajo lento, porque recorrimos todas las áreas municipales apenas asumimos y, con alguna excepción, prácticamente todas las áreas de servicios estaban con los mismos problemas”.
“Hay buena predisposición y el trabajador no quiere estar todos los días sin actividad”, destacó de la actitud que están teniendo los empleados con el cambio de modalidad.
Impuesto inmobiliario
En cuanto al impuesto inmobiliario, que pasaría a percibir la provincia, Souto dijo que “el presupuesto ha sido reconducido, ya es el segundo año que se reconduce, y para 2015 era de 1250 millones de pesos originariamente. En estos momentos estamos en conversaciones con la provincia, porque había alguna duda del reparto de fondos del impuesto inmobiliario, que pasaría a recaudar la provincia. Esto tiene que ser aprobado en alguna de las primeras sesiones del Concejo, que empieza a funcionar a partir del lunes. Nosotros hemos acompañado la ley en general y en particular, atendiendo a que sabíamos que la situación de la provincia era mucho más complicada que la Municipalidad de Ushuaia”, indicó.
No prevé una baja ingresos, si bien “todavía no está claro, porque si hay un aumento sobre el valor, compensaría la pérdida de porcentaje que cobraba la Municipalidad. Y sabemos que va a haber un revalúo inmobiliario importante. Los técnicos de economía del municipio trabajan con los de la provincia para ver en cuánto impactaría, de acuerdo al aumento que tenga el impuesto”.
A la justicia
Consultado sobre la actitud a tomar una vez que la comisión revisora termine de evaluar la gestión Sciurano, dijo que “si hay irregularidades no tendremos dudas en presentarnos como damnificados, por un mal manejo o por manejo doloso. El objetivo central de la creación de esta comisión es la revisión de lo actuado y, si corresponde que actúe la justicia, nos presentaremos nosotros mismos”, sentenció.
Se le preguntó sobre los 60 millones de las cuadras de asfalto que, según Sciurano, dejaba para que cobrara Vuoto. “Una gran parte de eso tenía que ver con las tres cuadras del Shopping a cielo abierto de San Martín. Eso está judicializado prácticamente por todos los frentistas, que no están pagando lo que se habían comprometido, por fallas muy claras en las obras. Por ejemplo, la falta de calefacción de las calles y la acumulación de nieve en el invierno”, señaló.
“La nieve se acumuló porque se hizo un mal cálculo y no se llegaba a calefaccionar la vereda como correspondía. Los frentistas judicializaron el tema y se están negando a pagar su contribución. Ahora hay que ver quién dirigió la obra y cuál es la responsabilidad del municipio, que tiene la responsabilidad primaria. Por más que tercerice una obra, no puede quitarse la responsabilidad”, advirtió.
Y agregó que “con ese criterio se hizo gran parte de la obra del Cochocho Vargas: se contrató un arquitecto para hacer el control, cuando la municipalidad tiene decenas de arquitectos en la secretaría de hábitat y en la de planificación. Hubo demasiada desprolijidad”, fustigó.
La nueva universidad
Por otra parte, como profesor de Historia y, antes de asumir como Secretario, como delegado del Ministerio de Educación ante la universidad nacional de Tierra del Fuego, Souto fue crítico de la labor que encaró el rector normalizador Domecq durante el gobierno de Ríos. “Fue una universidad de espaldas a la comunidad de Tierra del Fuego, llevada por personas que despreciaron a los docentes que venían trabajando hace más de veinte años, en la delegación de la universidad de la Patagonia San Juan Bosco”, afirmó.
“Fueron en algunos casos maltratados por tres años, por gente que no conocía el territorio, que hablaba de una política territorial y en su vida habían pisado margen sur o los barrios altos. Sólo se vincularon con las grandes empresas de la provincia, que son una parte de la realidad. La universidad se debe comunicar en forma profunda con la comunidad de las tres ciudades”, manifestó.
El objetivo ahora es “buscar a los jóvenes, porque uno de los problemas es el éxodo permanente en forma anual. Hay carreras que no se dictan acá, pero hay otras que permiten retener mil jóvenes por año. Cuando se van, muchos no regresan”, sostuvo, satisfecho por la cantidad de inscriptos luego de que se decidiera prorrogar la fecha para anotarse, hasta febrero.
La mala gestión anterior, para Souto, quedó plasmada en las elecciones. “En el resultado de la elección del rector se vio. El 70% de la comunidad universitaria de la UNTDF, docentes, no docentes, alumnos y graduados, acompañaron la propuesta de Juan Castelucci, también muy acompañada por el intendente Walter Vuoto, porque era parte de los equipos de trabajo del intendente”, dijo.
Y destacó que “una de las primeras reuniones que tuvo Castelucci fue con el ingeniero Mario Ferreyra –de la UTN-, y con el ministro de Ciencia y Tecnología Koremblit para unificar el trabajo de las universidades”, lo que marca una diametral postura respecto de la que mantuvo Ríos.
“La universidad tiene que ser un pilar para el desarrollo en los próximos años”, concluyó.
Fuente: Diario Provincia 23.
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