Los datos se desprenden del último informe elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fisca (IARAF). A nivel nacional, la caída es aún más pronunciada y llega al 55%. En Capital Federal y Tierra del Fuego la parálisis fue prácticamente total, con una merma del 86% y 95% interanual.

Los efectos de la cuarentena están haciendo estragos en la faz económica. Distintos rubros comerciales y de la industria muestran datos alarmantes en estos más de dos meses de parate.

En el otro extremo, hubo sólo dos provincias que lograron salir indemnes y tener algo de crecimiento. Son justamente aquellas dos jurisdicciones donde hasta el momento no ha llegado el coronavirus: en abril Formosa tuvo un crecimiento de los despachos del 3,7%, mientras que en Catamarca se verificó un impulso incluso más pronunciado del 12%.

Entre las localidades patagónicas, Tierra del Fuego encabezó el ranking del declive para la obra pública y privada. El segundo peor registro en la región durante abril fue para Neuquén (-62,1%), sigue La Pampa (-52.3%), Chubut (-51,1%), Río Negro (-42%) y Santa Cruz (-24,8%).

“En el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio, debido a la emergencia sanitaria y su consecuente restricción a la circulación de las personas, ciertas actividades de la construcción pasaron a estar directamente suspendidas y, otras, trabajando con dinámica reducida. El total de cemento portland consumido en Argentina durante los primeros cuatro meses de abril de 2020 fue de 2.338.308 toneladas (tn.), observándose un 68,3% utilizado en bolsa mientras que el 31,7% restante fue consumido a granel”, señala Iaraf.

Acumulado en el año

La provincia con mayor consumo registrado durante el acumulado a abril 2020 fue Buenos Aires, con un total de 866.602 tn. Le siguen en importancia Córdoba con 292.773 tn. y Santa Fe con 174.507 tn. Entre estas tres provincias acumularon el 54,5% del total de cemento consumido. Las tres provincias mostraron en el mes de abril, una contracción del consumo de cemento mayor al 60% respecto al mes de abril de 2019.

En lo que va del año los números para Chubut también fueron negativos, con una merma del 26,5% para el primer cuatrimestre en términos interanuales.

El informe remarca que “si bien las caídas del consumo de cemento son explicadas en buena parte por el aislamiento decretado por el poder ejecutivo y la consecuente imposibilidad de construir, el sector de la construcción viene inmerso en una crisis, tras 19 meses de variaciones interanuales negativas (hasta marzo 2020) tomando datos del Indicador Sintético de la Actividad de la Construcción (ISAC) del INDEC. La industria acumula una contracción generalizada desde los máximos de actividad alcanzados en el año 2017, mostrando un encogimiento de la actividad del sector por encima del 20%”.