El concejal Silvio Bocchicchio, impulsor de las modificaciones sobre el proyecto original, destacó que “falta mucho por hacer en todos los campos, pero en materia de transporte público, hemos dado un primer paso”.

El proyecto presentado por el sindicato de taxis y el concejal Pino fue modificado en comisiones como así también, el mes pasado se trató en el Consejo Municipal de Discapacidad, por lo tanto llegó al recinto con un trabajo de fondo y la opinión de los distintos sectores interesados.

En esta línea, Bocchicchio explicó que las unidades adaptadas “deberán contar con la homologación de la autoridad competente”, y podrán ser utilizadas en el servicio regular “debiendo priorizar la solicitud de pasajeros con motricidad reducida toda vez que sea requerido”.

“Los vehículos deberán estar identificados y exhibir en el exterior de sus laterales el símbolo internacional de accesibilidad”, precisó el concejal de ECoS y agregó que “están habilitados para brindar el servicio en cualquier parada fija habilitada”.

Respecto a la acreditación de los conductores, el edil señaló que “los choferes que trabajen en este servicio deben acreditar capacitación dictada por instituciones enmarcadas en la Educación Especial y certificado de la secretaría de Políticas Sociales, Sanitarias y de Derechos Humanos, para el manejo de situaciones de traslado de personas con motricidad reducida, ya que es obligación prestar buena voluntad para colaborar con el ascenso y descenso de la persona al automóvil”.

Por último Bocchicchio resaltó que “el proyecto faculta al ejecutivo municipal a eximir al licenciatario de cada unidad adaptada del impuesto automotor y otros tributos; autorizando además al municipio a realizar la compra de los vehículos adaptados, adquirir las partes necesarias para adaptar las unidades estándar a este servicio, cediéndolos en préstamo a los licenciatarios”.