Candelaria Sosa, la joven que sufrió un accidente cerebrovascular en medio de su viaje de 15 años a París, falleció horas después de que los médicos le diagnosticaran muerte cerebral.

Luego de conocer las ciudades de Madrid y Barcelona, en compañía de su hermana Florencia, la chica de 15 años llegó a París y se descompuso cuando viajaba en un subte de la capital de Francia: comenzó a sentirse mal y se desmayó en pleno viaje. En el momento del ataque la joven fue auxiliada por una pareja de argentinos, que la llevaron hasta el Hospital Necker, donde fue intervenida de urgencia y quedó en coma farmacológico.

Según había relatado su padre, tras el accidente, pararon el tren e inmediatamente llegó una ambulancia de alta complejidad y la llevaron al hospital. "No bien llegó, la operaron y le salvaron la vida", sostuvo. "Hicimos un gran esfuerzo y le pagamos el viaje de cumpleaños en 36 cuotas. Salía más barato que la fiesta", dijo.

Los médicos planeaban someterla a una segunda cirugía, por lo que se estimaba que permanecería hospitalizada en París al menos durante dos meses más, pero sus condiciones neurológicas empeoraron y se hizo imposible salvarle la vida. Su madre, Patricia, había viajado y la acompañaba junto a su otra hija, de 22 años.

La adolescente vivía en la localidad de Benavídez y cursaba el tercer año del colegio Santa Ana de Pacheco. Tras permanecer internada y viendo que el tiempo de permanencia en Europa podría extenderse, su familia había iniciado una campaña para juntar fondos, con el objetivo de poder mantener la estadía de su hija en el sanatorio galo, ya que los costos en esa ciudad son muy elevados.