Una sala Ángela Loig colmada fue el marco en que en la noche de este último sábado se conmemoró el 30° aniversario de la Casa de la Cultura, un ícono de las expresiones culturales y artísticas de nuestra ciudad.

Como estaba previsto, esta primera celebración –habrá otras durante todo el año-, tuvo como protagonistas en el escenario a las bandas municipales de música de Río Grande y Ushuaia que, con alrededor de medio centenar de músicos en escena, brindaron un espectáculo imperdible.

La gran velada se inició con un video que recorrió con nostalgia y ribetes de emoción mucho de los 30 años de historia de la Casa de la Cultura tras lo cual se abrió el telón para que la Banda Municipal de Música de Río Grande brindara un concierto de resonante.

Dirigidos por Marcela Cárdenas, los músicos de la Banda Municipal presentaron un repertorio para la ovación, con la sobriedad y jerarquía a las que nos tienen acostumbrados. Entre temas, se presentaron alumnos de Hip Hop del Prof. Rodrigo Codina con coreografías bien movidas y muy visuales.

Inmediatamente después, se hicieron dos reconocimientos, uno al músico Héctor Mesina, quien el 1º de Abril alcanzó los beneficios de la jubilación y otro al director de la banda Municipal de Música de Ushuaia, Daniel Piñeiro, tarea que tuvieron a cargo Marcela Cárdenas y la secretaria de Promoción Social Analía Cubino.

Enseguida el telón volvió a abrirse y fue el turno de los ushuaienses que desplegaron un concierto memorable con actuaciones teatrales incluidas, lo cual le agregó la cuota de humor y espontaneidad a la noche. Excelentes interpretaciones y un repertorio diverso arrancaron también una ovación del público que disfrutó de esta doble velada musical.

La celebración iba llegando a su fin y fue así que no faltaron menciones de homenaje y reconocimiento a trabajadores y funcionarios que pasaron por la Casa de la Cultura, verdaderos hacedores de lo que hoy significa para la comunidad ese emblemático edificio.

Ya en el final se cantó el “Cumpleaños Feliz”, al son de las dos bandas que regalaron varios  temas de ensamble, se descubrió una placa alusiva a la conmemoración y como corolario se cortó una gran torta que los presentes compartieron para cerrar el festejo ya en el Salón de los escudos de las Provincias.

Fue una noche completa porque además se inauguró una exquisita muestra fotográfica de Alfio Baldovin y un mural que, bajo el título “Voy buscando la luz”, sintetiza todas las expresiones artísticas enlazadas con las ondas del viento fueguino, realizado por las artistas plásticas María Bacigaluppi, Ariadna Codina y Erica Morales.

También quedó a la vista del público un panel con las firmas de los innumerables artistas que pasaron por la sala Ángela Loig.