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'Las Farc quieren tenernos atados al pasado', dice Santos

Desde Milán (Italia), el mandatario condenó la oleada de ataques de la guerrilla.

El presidente Juan Manuel Santos condenó este viernes, nuevamente, desde Europa, los más recientes atentados de las Farc. Luego de visitar la Feria Mundial de Expomilan, en Milán (Italia), a donde asistió con el primer ministro Matteo Renzi, el mandatario se declaró triste por los nuevos hechos de violencia.

"Se entristece uno cuando en Colombia la guerrilla, con esos ataques irracionales e insensatos, quiere tenernos atados al pasado. La guerilla, con sus acciones de violencia, quiere destruir lo que el mundo desea preservar: el medioambiente", afirmó Santos.

Si bien la mayor parte de los ataques de las Farc desde que suspendieron la tregua unilateral –el 22 de mayo– han sido contra la infraestructura del país, el impacto de los atentados ha afectado a al menos un millón de colombianos.

De las 24 acciones militares de esta guerrilla –20 de ellas contabilizadas por la Defensoría del Pueblo hasta el 7 de junio–,por lo menos 13 fueron contra la infraestructura energética, vial y petrolera.

Solo por atentados contra torres de energía, en Buenaventura, estuvieron sin luz 400.000 personas; en Tumaco, 250.000, y en el Caquetá permanecían este jueves sin el servicio eléctrico 457.000 habitantes.

En la noche del miércole,s las Farc volaron en las afueras de Florencia una torre de energía que apagó a 15 de sus 16 municipios. Únicamente Solano se salvó porque funciona con una planta eléctrica.

Según la Cámara de Comercio del Caquetá, 1.047 establecimientos comerciales que dependen de la luz eléctrica resultaron inicialmente afectados en todo el departamento. Un 30 por ciento de los locales superaron luego la emergencia con plantas eléctricas.

“Las plantas generan un sobrecosto porque se está utilizando un combustible más costoso que la energía interconectada”, explicó Eduardo Moya Contreras, director ejecutivo de la Cámara de Comercio, quien agregó que, además, las plantas no soportan horarios extensos y se pierden productos perecederos. 

Según la entidad, el atentado de la guerrilla deja pérdidas estimadas en 1.375 millones de pesos.

El sector de la salud sufría este jueves serios  tropiezos. Marcela Trujillo, gerente de Nueva EPS del Caquetá, dijo que tras el apagón se quedaron paralizados. “La ciudad trabaja al 50 por ciento porque todas las instituciones dependemos de los sistemas de información y de internet para funcionar a cabalidad”, anotó.Gerardo Cadena Silva, director de Electrocaquetá, dijo que se espera que el servicio de energía se restablezca al mediodía de este viernes.

Mientras tanto, en Putumayo trabajan para contrarrestar los efectos del crudo derramado por presión de las Farc el lunes, cuando interceptaron a 23 tractocamiones que transportaban petróleo por la zona rural de Puerto Asís. Posteriormente, hicieron derramar el contenido de 19 vehículos que llevaban 3.120 galones crudo y que afectaron nueve humedales. Por la contaminación de nacimientos de agua unas 200 familias se quedaron sin el líquido.

Así mismo, tanto el Ministerio de Ambiente como Ecopetrol advirtieron que el petróleo derramado tras el ataque del lunes contra el Oleoducto Trasandino en Tumaco (Nariño) podría avanzar por el río Cuanapí hacia la bahía de Tumaco.

De acuerdo con el ministro de Ambiente, Gabriel Vallejo, a estas alturas del desastre se han reportado 7.000 familias afectadas, pero si el crudo llega al mar Pacífico, la cantidad aumentará. “El daño ambiental es irreparable, se están haciendo estudios del impacto en el agua, pero se estima que hay fuentes hídricas que tardarán hasta 12 años en recuperarse. Tenemos más de 36 kilómetros de contaminación que además afectarán la salud de las personas, no solamente por olor del crudo, también hay comunidades que utilizan esta agua para sus labores domésticas”, agregó Vallejo.

Todo esto sin contar la muerte en Nariño del ciudadano Selgibes Jasier Zambrano Rosero, de 38 años, por heridas sufridas durante un enfrentamiento de las Farc con la Fuerza Pública recién suspendida la tregua unilateral.

Desde Europa

Precisamente desde Bruselas (Bélgica), el presidente Juan Manuel Santos calificó las acciones de esta guerrilla como “irracionales” y “terroristas” y resaltó que son condenadas no solo por las comunidades afectadas, sino también por el país y la comunidad internacional.

“Y si están pensando (los guerrilleros) que así se hace la paz, están equivocados de cabo a rabo”, dijo Santos.

En Bruselas, al término de la cumbre Unión Europea-Celac, a la que concurrieron 61 líderes de Gobiernos europeos y de América, los mandatarios hicieron un llamado a las Farc para que apuren las negociaciones y se comprometan a poner fin a sus acciones de fuerza. También al Eln le pidieron que entre en negociaciones serias que permitan acabar con el conflicto.

Ante el requerimiento de tantas naciones a las guerrillas para que asuman un compromiso serio con la búsqueda de la paz, Santos le reiteró a la insurgencia que “la paciencia de los colombianos no es infinita” y que “hay que acelerar los resultados del proceso”, porque en estas condiciones el tiempo se vuelve determinante.

También el comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, se refirió al impacto negativo que tienen los recientes ataques de las Farc sobre el proceso de paz. “Es muy difícil explicarle al país los acuerdos, llenarlo de entusiasmo, cuando las Farc están cometiendo actos de terrorismo como los que han cometido en Putumayo, en Caquetá, llenando los ríos de petróleo, dejando la gente sin luz”.

Y agregó: “¿Eso para qué sirve? Para nada. Solo sirve para alejar a los colombianos de la paz”.

Jaramillo dijo esto durante un encuentro en Arauca con instituciones locales, organizaciones sociales y pobladores para explicar la recién acordada Comisión de la Verdad.

Las alertas a las Farc sobre los impactos desfavorables de sus ataques también están llegando de organizaciones de DD. HH.

Por impacto a civiles hay violación del DIH

Como una clara y grave infracción al Derecho Internacional Humanitario (DIH), calificaron expertos en el tema los atentados que han cometido las Farc en los últimos días en varias zonas del país.

Sobre los ataques a torres de energía y el derramamiento de crudo que afectan al medioambiente y a comunidades campesinas, los analistas enfatizaron en que esos ataques no corresponden a ningún objetivo militar y que por el contrario lo único que hacen es afectar a las comunidades y la naturaleza.

“Esas claras violaciones al DIH confirman está práctica permanente de las Farc. Jurídicamente se llama violación al DIH porque se hacen los ataques sobre objetos protegidos por este conjunto de normas y por la afectación que causa a las personas”, aseguró Julián Huertas, profesor de Derecho Internacional de la Universidad de la Sabana, quien agregó que lugares como represas, hospitales, iglesias y escuelas son los espacios que resguarda el DIH.

Para el analista Rafael Nieto, los últimos atentados de la guerrilla no solo evidencian una falta de objetivo militar, sino también que se han enfocado en crear una “afectación a bienes civiles con una consecuencia grave para el medioambiente y las comunidades”. Añadió que esto muestra “claramente una incoherencia de las Farc con su discurso político y con el proceso de paz”. Por su parte, Carlos Patiño, internacionalista de Universidad Nacional, afirmó que los ataques de las Farc más allá de ser violaciones al DIH también se configuran como un “intento” de esa guerrilla por “retomar una posición de poder”.

Dijo que buscan “mostrar que tienen control militar sobre algunos territorios” para así poder “presionar por mejores logros políticos en la mesa de negociación de Cuba”.

Tres policías muertos

Una patrulla policial que ayer hacía control en la vía Panamericana, tras un atentado de las Farc con explosivos que dañó la infraestructura, fue atacada por el grupo guerrillero solo nueve horas después del primer atentado. Tres policías murieron y dos quedaron heridos.

Máxima alerta

Un total de 12.000 hombres de las Fuerzas Armadas tienen a su cargo la vigilancia de la infraestructura energética y vial del país, y están en máxima alerta desde la suspensión de la tregua unilateral de las Farc. Sin embargo, no alcanzan a cuidar todos los puntos vulnerables.


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